Oración Comunitaria 21/02/2013

Entrada.

Dios es capaz de todo con los que le quieren y con los que quieren caminar a su encuentro. Dios es capaz de no dejarnos morir y de levantar todo lo mejor que está oculto en el secreto de nuestro corazón.

Dios es la mayor provocación que podemos tener en la vida.

Quien se asoma a Dios descubrirá que Dios le asoma a un mundo impensable. Dios provoca descubriéndonos todo el misterio de nuestro corazón… ¡y de su corazón!
Dios no se parece en nada a las leyes del mercado: Has producido tanto, te corresponde tanto. Dios no funciona por incentivos o pagas extra. Dios no es comercial. Ni compra ni vende. Ni se compra ni se vende.

Dios es provocación, sugerencia, silencio, asombro, sorpresa…

Si un día vislumbras en la penumbra a Dios, ese día tu vida cambiará.
La Cuaresma es tiempo de pararse a escucharlo, de mirar más allá de lo aparente para encontrar a Dios. La Cuaresma es tiempo de gracia que nos puede cambiar la vida. Atrévete a dejarlo entrar en ti. Con Francisco nos disponemos a escuchar su Palabra, diciendo juntos: Oh Alto y glorioso Dios…

Lectura A.T: Isaias 58.

Así dice el Señor Dios: Grita con fuerza y sin miedo, alza la voz como una trompeta, denuncia a mi pueblo sus maldades, a la casa de Jacob sus pecados. Porque día tras día me buscan y se esfuerzan por conocer mi camino, como un pueblo que practicara la justicia, como si no hubieran abandonado mis mandamientos. Vienen a preguntarme cuáles son sus obligaciones y desean acercarse a mí y hasta me reclaman: “¿Para qué ayunamos, si no lo tomas en cuenta?; ¿Para qué nos afligimos, si tú no te fijas?”

Pero los días de ayuno hacéis negocios y obligáis a trabajar a vuestros obreros; ayunáis para pelear y reñir, y daros puñetazos a mansalva.

Si queréis que el cielo atienda vuestros ruegos, ¡ayunad, pero no como ahora lo hacéis!¿Acaso el ayuno que he escogido es sólo un día para que el hombre se mortifique?¿Para que incline la cabeza como un junco, haga duelo y se cubra de ceniza?¿A eso llamáis vosotros día de ayuno y el día agradable al Señor?

El ayuno que yo quiero es éste: romper las cadenas de injusticia y desatar las correas del yugo, poner en libertad a los oprimidos y romper toda atadura. ¿No es acaso el ayuno compartir tu pan con el hambriento y dar refugio a los pobres sin techo, vestir al desnudo y no dejar de lado a tus semejantes? Si actúas así, tu luz despuntará como la aurora y tus heridas sanarán rápidamente; tu justicia te abrirá el camino, y la gloria del Señor te seguirá. Llamarás, y el Señor responderá; pedirás ayuda, y él dirá: “¡Aquí estoy!”

Noticia: 40 dias con los 40 últimos.

Este año la campaña de cuaresma “40 días con los 40 últimos” nos propone volver nuestras miradas hacia nuestra propia vida, la de los países ricos (también España, ya que a pesar del contexto actual, sigue siendo rico comparado con los cuarenta últimos), nuestra forma de comportarnos y las consecuencias que tiene para los últimos. La campaña se divide en varios bloques temáticos y ha comenzado abordando la relación que existe entre nuestra forma de alimentarnos y la desnutrición y carencias de otras personas, junto con las consecuencias que la producción industrial de alimentos tiene para el medio ambiente y para la propia salud de los consumidores.

En España, en sólo dos generaciones hemos pasado de la escasez a la abundancia, lo que nos ha llevado de economizar a derrochar. Según informa una resolución del Parlamento Europeo, en la cadena de producción, suministro y consumo se desperdicia el 50% de los alimentos. Basta con acercarnos a la puerta de atrás de un supermercado para ver a diario la gran cantidad de alimentos que, en su mayoría en buen estado, van a la basura. En ocasiones sus políticas internas prohíben darlo a las personas sin recursos que, cada vez más, esperan a recogerlo.

Lo cierto es que nuestro modelo consumista ha entrado en déficit ecológico, agotando lo que nos corresponde, y si seguimos comiendo, respirando y contaminando es porque contraemos una deuda con el resto de países y con las generaciones futuras. Además, esta cultura consumista ha hecho de la alimentación un negocio muy importante, controlado por las grandes compañías agroalimentarias. Ellas son las que acaparan las tierras de cultivo, controlan la producción de semillas, fertilizantes y plaguicidas, y son capaces de controlar los precios de los alimentos, a través de su influencia en los gobiernos y de la especulación bursátil. Además, los posibles beneficios del desarrollo de esta industria nunca llegan a los habitantes de las zonas de producción. Algunas consecuencias son:

• En la India más de 200.000 campesinos se han suicidado en los últimos años, sobre todo por las deudas contraídas por no poder pagar las semillas, fertilizantes y plaguicidas proporcionadas por las grandes empresas agroalimentarias.
• Se estima que al menos un 55% de la inversión agrícola tiene carácter especulativo, cifra que va en aumento a medida que se liberaliza el sector. Burundi fue uno de los países más afectados de África Subsahariana por la crisis de los precios internacionales en 2008. Concretamente, en sólo un año, productos básicos como las judías aumentaron un 55%, el arroz un 22 % y la mandioca un 20 %. La escalada de precios de los alimentos se ha mantenido hasta el presente.
• En Colombia, después de años de inestabilidad, muchos campesinos que vuelven a sus tierras se las encuentran ocupadas por plantaciones de palma. Las reclamaciones de propiedad son difíciles: desde el 2005 se han registrado más de 70 asesinatos de líderes de organizaciones reclamantes de tierras.
• De cada 100 dólares que entran en Chile por la venta de salmón (primer productor mundial de este pescado), 40 son beneficio empresarial y 4 llegan a los trabajadores como salario; el resto son gastos diversos. Los pescadores artesanales tienen prohibido por ley capturar los salmones accidentalmente escapados de las balsas de cría, ya que pertenecen a las compañías salmoneras.

Por otro lado, el consumo excesivo de carne por parte de los países ricos, además de una actitud poco saludable, es origen de algunas situaciones inmorales en estos países. Los piensos con los que se engorda el ganado son elaborados a base de legumbres (principalmente soja) y cereales. La soja se ha convertido en el principal monocultivo del siglo XXI. Muchos bosques, selvas y huertos familiares han sido eliminados para plantar una soja transgénica resistente a un veneno “matatodo”. Las fumigaciones destruyen la biodiversidad y afectan a la salud de las personas. El 73% de todos los cereales utilizados en España se utilizan para alimentación animal. En un mundo donde, según la FAO, hay más de mil millones de personas “severamente desnutridas” y cada día mueren de hambre 40.000 personas –un tercio de ellos, niños– es sencillamente inmoral engordar el ganado con alimentos aptos para el consumo humano. Esta inmoralidad se agrava por el hecho de que en la conversión del alimento vegetal en carne animal, hay una pérdida nutricional: se necesitan 9,5 Kg de pienso para producir 1 Kg de ternera. Según los nutricionistas, si la dieta es equilibrada es suficiente comer carne 2 ó 3 veces por semana.

Advierte también la campaña de las consecuencias que acarrea la producción de ciertos alimentos nada ecológicos. El aceite de palma (y también el de coco) están detrás del etiquetado de muchos productos en cuya composición aparecen “aceites vegetales”. En Indonesia, grandes extensiones de selva tropical ha sido sustituidas por monocultivos de palma aceitera, afectando a la biodiversidad y condenando a la extinción a especies como el orangután.

Con respecto al consumo de ciertos pescados, la Perca del Nilo fue introducida artificialmente en el lago Victoria, destruyendo completamente el ecosistema natural de uno de los lagos más importantes de África. Cada día 500 toneladas de Perca salen con destino a Europa, etiquetadas en muchas ocasiones como mero. Así mismo, la Panga, un pescado muy popular, es producido en un 90% en el delta del río Mekong, en Vietnam, donde las condiciones de trabajo, tanto de los hombres en las balsas como de las mujeres en las factorías, son lamentables. Por otro lado, la pesca extranjera en las costas de

Somalia ha dejado sin trabajo y sin la principal fuente de alimento a la población costera. El peligro de la piratería fue uno de los argumentos a la hora de impulsar la operación militar Atalanta, cuyo coste para España, con la flota atunera mayor de Europa, se estima en 75 millones de euros anuales, una cifra muy superior a la Ayuda al Desarrollo destinada a este país.

Nuestra alimentación es además muy dependiente del petróleo: maquinaria, envases, productos químicos, y sobre todo transporte. Mientras a nuestro alrededor vemos cómo las tierras se abandonan porque no puede vivirse del campo: los precios que se pagan no dan para cubrir costes. Sin embargo traemos muchos alimentos de países lejanos. Puede que el petróleo necesario para su transporte proceda de Guinea Ecuatorial. Según un informe del Senado de EE.UU, con lo que la mayor petrolera del mundo paga al gobierno de ese país por la explotación de su petróleo, cada habitante podría vivir con 35.000 dólares anuales, más que la renta per cápita española. Sin embargo, los gobernantes corruptos se lo quedan, enviándolo a paraísos fiscales, y sus gentes malviven bajo el umbral de la pobreza.

¿Qué podemos hacer? La campaña propone además algunas actitudes sencillas que podemos llevar a cabo en nuestro día a día para cambiar esta situación y nuestra forma de alimentarnos como leer el etiquetado de los productos, no desperdiciar comida, consumir productos de temporada o evitar consumir alimentos a base de los productos anteriormente mencionados. Y todo ello conscientes de que al cambiar nuestra forma de alimentarnos estaremos también cambiando nuestro mundo.

Evangelio: Mt, 5, 43-48.

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: "Habéis oído que se dijo: "Amarás a tu prójimo y odiarás a tu enemigo”. Yo, en cambio, os digo: Amad a vuestros enemigos, y rezad por los que os persiguen. Así seréis hijos de vuestro Padre que está en el cielo, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y manda la lluvia a justos e injustos. Porque, si amáis a los que os aman, ¿qué recompensa tendréis? ¿No hacen lo mismo también los publicanos? Y si saludáis sólo a vuestros hermanos, ¿qué hacéis de extraordinario? ¿No hacen lo mismo también los gentiles? Por tanto, sed perfectos, como vuestro Padre que está en el cielo es perfecto.

Peticiones/ Acción de Gracias/Padrenuestro
Salida.

Cuaresma no es un día ni dos… Es una manera de vivir la existencia con alegría y con preocupación penitencial. No hacemos Cuaresma para ser buenos un día, sino sencillamente para ser buenos, para ser nuevos, para intentar hacer la voluntad de nuestro Padre Bueno, que no es otra que seamos felices y hagamos felices a los demás.

Que Dios todobondadoso nos acompañe en el camino de conversión, nos libre de todo mal y nos mantenga en su bendición. Amén. Con Francisco terminamos diciendo: Te adoramos…